domingo, 2 de noviembre de 2008

"Quizás, el momento de la despedida es el momento más intenso en la relación entre dos personas. Cuando uno se despide de alguien, uno está más con esa persona que si uno la ve vulgarmente. Al mismo tiempo, uno sabe que ésa es la última vez. Quiero decir que en la despedida se dan a la vez (supongo que es eso lo que ella quiso decir), se dan a la vez la máxima presencia y la máxima ausencia, ¿no?"

1 comentario:

·Jime· dijo...

Gi... tu cita me im-pac-tó. Primero porque no esperaba encontrar algo así en este blog...suena más a cita de "sin-penanigloria" que a "involuntaria". Y, segundo, porque me dejó pensando... que reflexión tan profunda y cierta, pero a la vez tan cruel, y qué triste cuando asumimos que no vamos a volver a ver a alguien...Solo nos queda la espera de encontrarnos algún día juntos ante Dios en la eternidad, y eso ayuda a calmar el hueco que deja la ausencia...
Pero, mientras haya vida, mientras ambos sigamos caminando sobre esta tierra, siempre nos podemos volver a encontrar. Y, tal vez, ese estado de profunda unión en la separación, sea superado y la máxima profundidad venga en ese nuevo encuentro, porque a pesar de todo (de lo bueno y de lo malo) volvemos a elegirnos...