domingo, 22 de noviembre de 2009

Entre Blogs y Ciborgs

El último sábado fue un día de coincidencias tecnológicas. Amanecí en el Blogday, rodeada de gente que hablaba de redes sociales, comunidades online, tecnologías móviles y demás variaciones vinculadas a aspectos tecnológicos que exceden lo meramente relativo a los blogs. Esta de más decir que hoy en día, hablar de blogs e ignorar todo el resto de maneras de vincularse explotando las posibilidades que brinda la web, resulta un tanto escaso. Quizás unos años atrás, denominar al encuentro "Blogday" y hablar netamente de eso, era acorde a la Web con la que interactuábamos; hoy en día, los blogs estan quedando levemente al margen, desplazados por formas de comunicación mucho mas interactivas, más dialógicas, que posibiliten alguna clase de encuentro, si bien a la distancia, con aquellas audiencias a las que el medio se dirige.
Al margen de el temario general del encuentro, una de las ponencias capturó particularmente mi atención y más tarde haría que divagara en torno a ideas futuristas no tan lejanas (ya entenderan). La misma se refería a la revolución móvil, en particular haciendo énfasis en los dispositivos telefónicos (que hoy en día estan cada vez más lejos de su aspecto meramente telefónico). En relación a esto, se expusieron avances tecnológicos hacia los que caminamos en un futuro no muy lejano. Teléfonos con realidad aumentada, interfaces gestuales y m-learning son los nuevos dispositivos que se estan desarrolando en alguna parte del mundo, y son hacia donde se dirigen las mayores espectativas de todos quienes pretenden hacer uso de las nuevas tencologías. De repente, nos figuramos en posesión de dispositivos celulares que con tan solo posarlos frente a lugares, personas, etc, nos brindarian en pantalla la información disponible sobre aquello que tenemos delante. Tanto un GPS como un catálogo inmobiliario, asi como una busqueda expres de aquella información personal disponible en alguna parte sobre las personas que tenemos delante, forman parte de las utopias hacia las que se encaminan los últimos desarrollos. Además de la posibilidad con la que contarían algunos de manejar los movimientos en pantalla a través de movimientos fisicos reales, mediante sus propias manos y sin "tocar" nada mas que el aire. Sensores que captan el movimiento harían posible este accionar.
Esto ya existe, esta lejos de nosotros, pero existe. Es cuestión de tiempo y de mercado para que todos estemos en posesión de estos dispositivos. Asi como en su comienzo tener un TV era un lujo de pocos, y hoy es casi impensable su ausencia; o los celulares en sus inicios y su actual difusión en más de 50% de la población mundial. De la misma manera, se piensa factible en un futuro no muy lejano el contar con estos nuevos móviles revolucionarios, en el sentido del cambio cultural que promueven.
Salgo de el entorno tecnológico del CEC, y horas mas tarde me encuentro en el cine, viendo la última película de Bruce Willis, "Identidad Sustituta". Al margen de la recomendación de la película, el planteo que propone resulta interesante, casi paradójico dadas las circunstancias. La película se sitúa en una época futura?, en la que los ciudadanos han adoptado una forma de vida a la distancia, a través de "surrogados", sustitutos robóticos que los representan, haciendo todo lo que sus "amos" deberían, mientras estos los manejan desde sus hogares, alejados de la realidad, y de los peligros que ella encierra. Estos "Surrogados" generan a sus dueños una percepción totalmente real del mundo con el que se encuentran, es decir: lo ven, lo escuchan, lo huelen, lo perciben a través de la piel. Es un verdadero estar a la distancia, con una vivencia perceptiva casi real. Lo único que los amos no sienten son los golpes y roturas que los robots pudieran padecer. Fuera de eso, su vida transcurre a través de sus "móviles".
Y ahora el punto de contacto que une las dos patas tecnológicas de mi día. Hasta dónde ese planteo futurista esta tan lejano del mundo real en el que vivimos? Cada vez es más factible cada una de los aspectos que posibilitan los "surrogados" de la película. La presencia a la distancia, o telepresencia, ya es un hecho de algún modo. Las videoconferencias, videollamadas, streaming´s, etc, hacen que uno pueda estar en un lugar y en otro a miles de km al mismo tiempo. El ver el mundo a través de pantallas o lentes es observables hoy en día. Basta asistir a un evento, cualquiera que sea su tipo (recitales, eventos políticos, acontecimientos inesperados), que se podrá observar varias "pantallas" que ya lo estan reprensentando. Seguramente una buena parte de los presentes, en el afán de producir contenidos que brinda la posibilidad de hacerlo, estará vivenciando el suceso mediatizado por la pantalla aún estando delante de la realidad que pretende representar. Aún estando ahí, estamos viendolo en diferido, en la pantalla que lo representa. Sin contar las formas mas tradicionales de quienes observan aquello que no presencian mediante los ojos de otros que lo registran. Si a esto le sumamos las nuevas tecnologías de interfaces gestuales, que permitan mover o accionar cosas mediante infimos gestos, estamos llegando a los ciborgs que muestra la película. Solo restaría darles la sensibilidad perceptiva, que nos envie las señales de las características del mundo con el que entra en contacto nuestro dispositivo y otorgarle figura "humanizada" para largarlo al mundo como un emisario de nuestra persona. El resto de las funciones ya son hoy en día visibles de algun modo.
Lo que cabe preguntarse también, al igual que en la película, y sin pretender ser anti-tecnológica, es qué tan dispuestos estamos a vivir en un mundo mediatizados por interfaces? Hasta dónde estamos dispuestos a cambiar la posibilidad del contacto real por un contacto tecnológico? Hasta dónde estamos dispuestos a dejar en manos de "aparatos" nuestras vidas? Dónde quedará la vida real, cuando todo sea apretar un botón y ver que se dice en los interminables catálogos mundiales al respecto? Cuánto de nosotros estamos dispuestos a dejar al alcance del mundo? Qué nos estaremos perdiendo al dejar todo en manos de "algo mas" que lo haga por nosotros?

sábado, 4 de julio de 2009

Historia de una tesis

Noche en casa, cena cotidiana. El televisor al fondo de la escena, el reproductor de DVD encendido, y una serie de dvd´s para elegir sobre la mesa. “Vos cual capítulo viste? Yo me quedé en el 7” pregunta uno; “yo a ese lo vi anoche, y vi el 8 también” responde otro; “ah no, no vale, yo me quedé en el 6!, bueno, no importa lo miro en la PC” agrega un 3ero. La discusión es acerca de cual capítulo de la serie que esta de turno vamos a mirar. Nada resultaría trascendente, a no ser que uno lo mire en una cierta perspectiva casi histórica podría decirse. Lejos quedaron aquellos tiempos en que la discusión se agotaba en la elección entre uno y otro canal, a costa de la pérdida irremediable de la emisión del programa del canal no elegido. Lejos también las caras largas del que su opción no era la que tenia mayor quórum. Hoy en día, cada uno puede optar por mirar lo que quiere, cuando quiere y donde quiere. Mientras unos miran un programa en el tele, otros descargan capítulos de una serie extranjera que no se emite en ningún canal, al tiempo que otro mira en la PC una película recién estrenada en el cine.
Entonces resulta interesante detenernos a observar estos cambios que están teniendo lugar y que generan este entorno digital, que permite nuestros diversos accesos a los productos audiovisuales. Con tan solo pensar que hoy es posible viajar en colectivo mirando una película tailandesa que no se exhibiría mas que en algún recóndito circuito alternativo, o mirar capítulos o programas que se transmitieron en nuestra ausencia frente a la pantalla del televisor es todo un desafío acerca de donde estamos parados en cuanto a tecnologías de acceso, y ante las posibilidades, en lo que a consumo se refiere, se abren.

De todo esto surge mi tema (nuevo, reciclado, aplastado, redondeado, amasijazo, desechado, vuelto a agarrar, girado, retorcido, y por mucho tiempo, en vías de mutación). En este cruce entre lo que veo, lo que pienso, lo que leo (poco, debo reconocer no sin acongojarme), lo que encuentro a mi paso, y las ideas que se acumulan muy de a poco en varios documentos de Word, este es el primer esbozo del camino que pretendo seguir.

Acá les dejo un esbozo de lo que suman las anotaciones varias:

Wordle: Mi tema